Carlos del amor la vida a veces

Donna summer – i feel love (en directo)

«¿Pero quién ha prohibido a las mujeres los estudios privados e individuales? ¿Acaso no tienen un alma racional como los hombres? … ¿Qué revelación divina, qué determinación de la Iglesia, qué dictado de la razón nos hizo una ley tan severa?» -Sor Juana Inés de la Cruz, en Autodefensa Espiritual (traducido de Tapia Mendez 1993).

Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana nació el 12 de noviembre del año 1648 o 1651. En sus primeros años de vida, también se llamaba Juana Ramírez de Asbaje. Adoptó la versión más famosa de su nombre -Sor Juana Inés de la Cruz- tras ingresar en la orden de monjas jerónimas. Nació fuera del matrimonio en el pueblo de San Miguel Nepantla, a 60 km al sureste de la ciudad de México. Era hija ilegítima de Isabel Ramírez Santillana, una mujer criolla (persona de ascendencia blanca europea española nacida en América), y de Pedro Manuel de Asbaje y Vargas Machuca, un capitán español que salió de su vida muy pronto, y del que ella sabía muy poco. La comprensión del papel social que se le impuso por ser criolla e hija ilegítima -condiciones ambas que habrían dejado a otros sin perspectivas en la vida- hace que su posterior renombre en la corte, la historia intelectual y la cultura popular sea aún más notable.

Fernando sor, de amor en las prisiones

Comenzó a estudiar Biblioteconomía en la Universidad de Murcia, carrera que dejó para comenzar a formarse en la Licenciatura de Periodismo en la Universidad Carlos III de Madrid. Licenciatura de la que salió como becario en Televisión Española , más concretamente en el Centro Territorial de Murcia, donde trabajó en numerosas áreas: deportes, política, cultura, eventos, presentador, etc. A lo largo de su vida profesional ha estado siempre vinculado al periodismo cultural, trabajando en la sección de cultura de los informativos de TVE (primero en la Región de Murcia y finalmente en el Telediario).

Dentro de su trabajo, lo que más ha destacado ha sido transmitir información sobre los principales festivales de cine del mundo, las grandes muestras artísticas y entrevistas con numerosas y relevantes figuras del orden cultural como Joaquín Sabina , Michael Stipe (cantante de REM ), Joan Manuel Serrat , Woody Allen , David Trueba , Pedro Almodóvar etc. Normalmente cubre festivales y galas como el Festival de Cannes o los Premios Goya. Con un estilo peculiar, Carlos de Amor suele construir un mundo en apenas minuto y medio de reportaje que lleva al espectador a descubrir la historia de un cuadro, una película, un libro o simplemente una vida.

Up – la vida matrimonial de carl y ellie (pixar)

ambiente de la película pero en forma de sonido, ¿no es así? No todos los cineastas desean hacer esto, por supuesto. A menudo, la música sólo quiere «captar» el estado de ánimo de una escena individual o marcar a un personaje individual. Pero cuando una pieza musical capta perfectamente toda una obra, qué dulce puede ser registrar y seguir el efecto. Carlos Saura

La canción se escucha tres veces. La más efectiva de las tres (por favor, búsquenla) es la primera, que se escucha sobre los primeros créditos, detrás de los cuales una imagen fija de Antonio se transforma lentamente desde el niño golpeado por el amor no correspondido, hasta el hombre adulto igualmente golpeado. La aparición más famosa de la canción se utiliza para acompañar a Antonio Gades y Cristina Hoyos en un posterior «baile del fuego», una escena por la que la película es conocida, pero que seguramente necesita el sonido de sus pies aterrizando en la tierra editada.

El Amor Brujo (y el uso individual de Saura de esta canción) trata de un dolor prolongado. El horror de un amor insatisfecho puede provocar un enfado, pero la mayoría de las veces (como aquí) conduce a un largo cansancio, a una tediosa incapacidad, y a veces (como aquí) asfixia toda una vida aunque años después haya un final feliz. Puede que este amante «consiga la chica» al final, pero seguramente parece llevar la marca de la angustia en sus rasgos todavía. Y eso también afecta a la persona amada.

Elton john – you gotta love someone

Carlos del Amor (Murcia, 1974) ha llegado al café-restaurante. Llevar a sus hijos y un mal movimiento al atarse los cordones le ha dejado tieso. El periodista es subdirector del área de cultura del Telediario de TVE y lleva 21 años en la corporación. Acaba de publicar ‘Emociónate. La doble vida de las imágenes’, un libro con el que ha ganado el premio Espasa 2020. Durante la charla no deja de hablar con entusiasmo de sus hijos, Martín y Lope. Del Amor es un atrevido que se toma sus licencias. Pocos pueden presumir como él de haber pernoctado junto a los borrachos de Velázquez y las Tres Gracias de Rubens, y simular un fundido a negro para alejar al espectador de la somnolencia.

10.00 horas. Como hoy voy a cubrir una exposición en el Museo del Prado, voy a Producción, me dirijo a la sala de reporteros y les cuento más o menos lo que pienso hacer. Me gusta llegar temprano y dar un paseo a solas para ver los cuadros, descubrir lo que la exposición quiere contarme y lo que yo quiero contar de ella. Una mirada pintada, una lágrima, un gesto son el punto de partida de la historia. Lo que más dolores de cabeza me causa antes de hacer un reportaje es idear un argumento.